Estudiante universitaria hallada sin vida tras desaparición en la vía Popayán-Piendamó
La comunidad académica de la Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín, y la sociedad en general se encuentran consternadas tras confirmarse el hallazgo sin vida de la estudiante Angie Pahola Tobar Calpa, de 26 años, quien estaba desaparecida desde el 27 de agosto de 2025.
Angie cursaba el último semestre de Ingeniería Administrativa en la Facultad de Minas de la Universidad Nacional y había iniciado su regreso a Medellín después de pasar vacaciones en el municipio de Guachucal, Nariño. Durante el trayecto, que realizaba en un camión de carga junto a un amigo de la familia y al ayudante del conductor, el vehículo fue interceptado en la vereda El Túnel, entre los municipios de Popayán y Piendamó, en el departamento del Cauca.

Según testigos, el transporte fue detenido en un retén ilegal instalado por hombres armados que se habrían identificado como miembros de un grupo armado ilegal que opera en la región. De acuerdo con los relatos, Angie y uno de sus acompañantes fueron obligados a descender del vehículo, mientras que el otro logró escapar. Desde ese momento, la joven no volvió a ser vista hasta su hallazgo sin vida semanas después.
La Universidad Nacional de Colombia confirmó oficialmente su fallecimiento el 22 de octubre de 2025, expresando su profunda consternación y lamentando la pérdida de una estudiante destacada que estaba a punto de culminar su formación académica. En un comunicado, la institución también solicitó a las autoridades competentes que se esclarezcan los hechos y se encuentren los responsables de su muerte.
El caso ha generado una profunda movilización en el campus y muestras de solidaridad en todo el país. Estudiantes, docentes y familiares realizaron vigilias y actos simbólicos para exigir su aparición con vida y, posteriormente, justicia ante este trágico desenlace.
Este lamentable hecho pone en evidencia la vulnerabilidad de los corredores viales en zonas como el norte del Cauca, donde la presencia de grupos armados ilegales y los retenes clandestinos siguen siendo una amenaza constante. Asimismo, resalta la urgencia de fortalecer los mecanismos de protección y seguridad para quienes transitan por estas regiones del país.
Los familiares de Angie, junto con la comunidad universitaria, piden que la investigación avance con rapidez y transparencia, para que el dolor se transforme en acciones concretas que garanticen justicia, seguridad y respeto por la vida humana en Colombia.
Generado con ayuda de la IA