La desactualización del Plan de Ordenamiento Territorial, POT; del Plan Especial de Manejo del Centro Histórico, PEMP; los acelerados tramites de convocatoria y adjudicación de licitaciones, el incumplimiento de requisitos previos al inicio de obras, como licencias ambientales y de la Junta de Patrimonio del centro histórico; y las rivalidades entre sectores políticos que se oponen a las propuestas de sus rivales, son algunos de los factores que han frenado el inicio de obras adjudicadas y financiadas con dineros gestionados ante el gobierno central, tales como la galería del barrio Bolívar, la Avenida de los Próceres y recientemente la Torre a construir al lado del Hospital Universitario San José.
Para conocer la perspectiva de estos proyectos en la administración de Juan Carlos Muñoz Bravo, Proclama del Cauca y Valle entrevistó a la secretaria de planeación municipal, Yasmín Hurtado, quien se refiere a los proyectos que retomarán y las gestiones para superar inconvenientes que impiden iniciar las obras; al arquitecto Jorge Paz, quien explica las características de diseño y servicios que prestarán los 10 pisos y el helipuerto proyectados para la nueva torre del Hospital Universitario San José; y al abogado Miguel Ángel Concha, Magister en Gobierno y Políticas Públicas.
En el caso de la Avenida de Los Próceres, entorpece su ejecución la colcha de retazos propiciada por el POT desactualizado, debido a que un tramo del trazado está clasificado como área urbana y otro rural, a pesar de estar en medio de urbanizaciones, y por esta razón requiere licencia ambiental expedida por la CRC, que el año pasado se negó autorizarla, después que un grupo de habitantes de Villa Robledo, entre ellos el entonces director de la CRC, objetaron la obra porque afectaba un humedal, estaba a 10 metros del río Cauca y atravesaba el área recreacional de su urbanización, incluida la piscina.
Fuera de que obras como la Avenida de Los Próceres y la Torre del Hospital San José, que son financiadas con recursos de la nación y fueron adjudicadas en licitaciones aceleradas, llama la atención, que por otros motivos y con participación de usuarios de la galería del barrio Bolívar ayudados por políticos en campaña, esta obra no pudo realizarse a pesar de contar con más de $20.000 millones para construirla.
Foto de Diego Cortes
En ese sentido, llama la atención que, por no actualizar el uso del suelo en todo el municipio, con el POT, ni el manejo especial del centro histórico, con el PEMP, el caos urbanístico de Popayán se manifieste en el progresivo “apeñuzcamiento” de carros y motos por las principales vías y en la congestión del centro, que debería ser más peatonal y de vocación turística.
Además, en la proliferación de urbanizaciones piratas y condominios absorbiendo veredas, y con el cobro de impuesto predial que empezó a actualizar la administración anterior al firmar un convenio con el IGAC, para implantar el catastro multipropósito, que si bien, significó mayores ingresos propios para el municipio, desencadenó gran cantidad de reclamos por exageradas alzas que tienen en aprietos a sus propietarios.
Todos estos factores impiden la ejecución de vías y obras urgentes cumpliendo las normas urbanísticas y ambientales y un plan de desarrollo coherente, y, que esto lleve a su retraso o sean expuestas a desgastantes pleitos jurídicos, después de haber obtenido millonarios recursos de la Nación, que no pueden aprovecharse, como sucedió con la galería del barrio Bolívar.
De esta manera, a la administración del alcalde Juan Carlos Muñoz, le correspondería impulsar, no sólo la ampliación del hospital San José, sino también, la construcción de la nueva galería, la recuperación de la Avenida de los Próceres y la construcción del malecón del río Molino.
Tomado de Proclama del Cauca.