La violencia contra los pueblos indígenas del Cauca sigue en escalada, en los últimos días dos líderes fueron asesinados y el CRIC asegura que hay una intención de erradicar a los pueblos indígenas.
El asesinato del miembro guardia indígena Edgar Tumiñá Gembuel, líder del pueblo Nasa, ha vuelto a encender las alarmas sobre la situación de violencia en el Cauca.
Tumiñá, de 48 años, fue atacado la noche del 1 de marzo en Toribío por hombres armados que le dispararon en la cabeza en múltiples ocasiones.
Según la ONG Tejido de Defensa de la Vida y los Derechos Humanos de la ACIN, este crimen no es aislado y se suma a una serie de ataques sistemáticos contra líderes indígenas y miembros de la guardia Nasa en el departamento.
La organización afirmó que el frente Dagoberto Ramos de las disidencias de las FARC había amenazado previamente a Tumiñá “su asesinato es parte de una estrategia de terror contra las comunidades originarias que defienden su autonomía y territorio”, aseguraron.
La preocupación por el homicidio de Tumiñá también se debe a que es el segundo asesinato de un guardia indígena en menos de un mes en el Cauca.
Para los líderes indígenas la situación se ha convertido en algo insostenible, por lo que esperan llevar los hechos a instancias superiores en busca de ayuda. Edwin Mauricio Capaz, coordinador de derechos humanos del Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric), se encuentra en Ginebra, Suiza. Capaz participa este mes en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, donde ha denunciado los hechos de violencia y espera exponer a fondo el recrudecimiento de la violencia en los territorios indígenas. Capaz aseguró que en Cauca se está perpetrando un “etnocidio” contra el pueblo Nasa.
“Son más de 40 guardias indígenas asesinados desde la firma del Acuerdo de Paz. La mayoría de estos crímenes siguen en la impunidad”, afirmó Capaz desde Suiza, en la oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, lo que causó gran revuelo.
Según el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), se han registrado 26 asesinatos de líderes sociales y defensores de Derechos Humanos en lo que va del 2025, a esto se le suman 11 masacres que dejan un saldo de 33 víctimas.
La ACIN afirmó en su comunicado que las comunidades indígenas del Cauca han exigido al Gobierno nacional una acción urgente para frenar el exterminio de sus pueblos sin embargo la violencia viene aumentando en la región.

Tomado de El Colombiano